Melena de León + Probióticos 11 Cepas
Una fórmula que conecta mente e intestino. Este suplemento combina el poder neuroprotector de la melena de león con una mezcla avanzada de 11 cepas probióticas, ofreciendo un enfoque integral para la concentración, la memoria y la salud digestiva. Ideal para quienes buscan claridad mental y equilibrio digestivo en un solo producto.
Composición por porción (2 cápsulas):
Extracto de Melena de León 1:50
Mezcla probiótica (11 cepas):
Bifidobacterium animalis ssp. lactis
Bifidobacterium breve
Bifidobacterium lactis
Bifidobacterium longum
Lactobacillus plantarum
Lactobacillus acidophilus
Lactobacillus casei
Lactobacillus paracasei
Lactobacillus brevis
Lactobacillus salivarius
Lactobacillus rhamnosus
Gelatina (cápsula)
¿Qué es la Melena de León y qué función cumplen los probióticos?
La Melena de León (Hericium erinaceus) es un hongo funcional que estimula el crecimiento de nuevas conexiones neuronales y protege la salud cerebral, siendo reconocida por mejorar la memoria, el enfoque y la regeneración cognitiva.
Los probióticos son microorganismos vivos que equilibran la flora intestinal, mejoran la digestión, apoyan el sistema inmune y pueden influir positivamente en el estado de ánimo gracias a la conexión intestino-cerebro.
Beneficios:
Mejora la memoria y concentración: Estimula la producción de neuronas y fortalece la función cerebral.
Soporte cognitivo a largo plazo: Ayuda a proteger el cerebro frente al deterioro neurodegenerativo.
Equilibrio intestinal: Favorece una microbiota saludable para una mejor digestión y absorción de nutrientes.
Fortalece el sistema inmune: Refuerza las defensas naturales del cuerpo desde el intestino.
Mejora de la digestión: Alivia molestias como hinchazón, gases o estreñimiento.
Regulación emocional: Contribuye a un estado de ánimo estable a través del eje intestino-cerebro.
Reducción de la inflamación: Apoya la salud digestiva y sistémica.
Indicaciones de consumo:
Tomar 2 cápsulas al día con agua.
Por la mañana: Para activar la mente y equilibrar el sistema digestivo desde el inicio del día.
Después de las comidas principales: Mejora la absorción de nutrientes y la digestión.
Durante épocas de alta demanda mental o estrés: Apoya el enfoque y modula la respuesta al estrés desde el intestino.